Sé que ha sido un buen tiempo desde que he publicado algo~ (FEBRERO AXY, DESDE FEBRERO QUE NO PUBLICAS NADA) Digamos que este año han pasado varias cosas a las cuales realmente no entraré en detalles pero que influyeron mucho en esto de la inspiración y también en mis tiempos para escribir.
Pero quiero terminar bien este 2014, y este enero y febrero del 2015 poder publicar más historias bonitas ♥ Todas las que pueda hasta tener que volver a clases.
Y bueno, terminando con mi palabreo xD (gracias a quienes lo leen) quiero dar unas gracias muy especiales a todas las lindas personitas que me han apoyado en todo hasta ahora ♥ A esas personitas que me dejan algún like en fb o que comentan y me sacan más de una sonrisa con ese amor que me dan y que a veces pienso que no merezco T3T Quiero que sepan que las quiero mucho y les retribuiré todo ese cariño a traves de nuevos escritos e historias que espero les gusten ♥
P.D: Últimamente ando muchísimo en Instagram, más que en fb o cualquier cosa, asi que se los dejo por si me quieren seguir --> **Click aquí**
Título: ジュンス が... ふたり♥ (Junsu ga... Futari) (No pregunten porque rayos le puse un título en japonés xD -creo que es porque me la he pasado leyendo mangas estos últimos mese- Pero la traducción más acertada sería 'Tengo dos Junsus')
Autora: Axy
Parejas: YooSu
Género: Romance / Fluff
Advertencia: NC-17
-El maestro Kwang ha tenido que retirarse por motivos
personales; de verdad agradeceríamos mucho si nos ayuda ocupando su puesto
maestro Kim- la directora de aquel jardín de infantes estaba hablando
seriamente con uno de los profesores -Como en el salón de 5 años está usted y
el maestro Shim; no creo que haya problema en que pueda pasar al aula de 4
años... Mañana hablaré con Shim al respecto-
El castaño se había quedado pensando... Separarse de sus
adorados niños del salón 'Girasoles' para conocer a los más pequeños del aula
'Tulipanes'. ¿Pero qué puede hacer? Es más como un favor para su empleadora, y
no puede decirle que no...
-Usted no se preocupe directora, yo me haré cargo de los
pequeños por el tiempo que sea necesario~- una linda sonrisa y ese compromiso
que aún no sabe, quizás haya sido la mejor decisión que ha tomado en su vida.
~~~~~~
-Junsu ah, ¿qué tal te va con los 'Tulipanes'?-
Es la hora del recreo para los niños, y los maestros que allí
les supervisan no han dudado en tomarse también un tiempo para conversar.
-No puedo creer que ya hayan pasado 3 semanas Changmin ah~
Aunque extraño a mis pequeños girasoles no voy a negarte que me he encariñado
con mis nuevos niños- sonríe brillante, mirando allí en los juegos infantiles a
sus pequeños, riendo y correteando por aquí y por allá -¿Ves a ese de allí?-
señala con el dedo índice a uno de los niños en los columpios -El de cabello
negro, se llama Junsu~ Como yo-
-¿De verdad?- cuestiona el morocho con una risita -¿Y es
medio torpe y despistado también?-
-¡¡Yah!! Shim Changmin!!- y allí está, su arsenal de
pucheros y berrinches que hacen ver al castaño como uno más de todos esos niños
de kínder -Eres malo conmigo~-
-Lo sé, lo sé~ Espero que sinceramente ese niño no sea como
tú solo por el nombre- se burla otro poco, ganándose un golpe en el brazo por
ese Junsu colorado de coraje.
-Babo, tiene buen apellido, y mi personalidad viene de los
Kim, no es por llamarme Junsu- frunce de nueva cuenta sus labios, haciendo reír
a carcajadas a su eterno mejor amigo.
-A veces me pregunto cuántos años tienes; sigues siendo la
misma persona que conocí a los 8 años-
-Ah claro, ¿y vas a decirme que tu si has cambiado? ¿Que has
madurado siquiera un poco? Estás loco-
Y quizás la conversación hubiera seguido un buen rato, de no
ser por esa campana que anuncia el final del recreo y les obliga a ir por sus
niños para volver al salón.
~~~~~~
-Junsu ah, ¿no han venido por ti aún?- cuestiona apenas ha
despedido al que creía ser el último niño en el aula.
El pequeño de cabellos azabache está sentadito en la
escalerilla junto a la puerta del salón, con su chompita puesta y su mochila en
la mano.
-No...- niega con la cabeza, mirando a su maestro con sus
grandes ojos negros que poquito a poquito comienzan a cristalizarse.
-No llores~- pide el castaño cariñosamente, sentándose al
lado del pequeño para cargarlo y acomodarlo sobre su regazo -Vamos a esperar
juntos, ¿si?- sonríe para el pelinegro, picándole una de las mejillas para
animarle un poco, recibiendo esa sonrisita contenta que de pronto le alborota
el corazón.
¿Está bien encariñarse así de un niño que no es suyo?
Es que el pequeño Junsu es tan adorable que con solo verle
su corazón de derrite.
-Appa se ha olvidado de mí- murmura el menor, jugueteando
con esas pulseras de colores que su maestro tiene puestas en la muñeca.
-No se ha olvidado de ti Junsu ah~ Seguramente está
trabajando un poquito más solamente, ya va a llegar...-
Intenta animarle, preguntándose por qué es que hoy no lo han
recogido, y por qué está viniendo su padre, si usualmente la que viene es...
-¿Junsu?-
Ambos, el castaño y el pequeño alzan la mirada ante aquel
llamado, observando a ese hombre de cabellos igualmente azabache que les mira
desde la puerta del aula.
-¡¡Appa!!- el más pequeño sale corriendo hacia el mayor,
saltando a sus brazos al instante -Appa, ¿te olvidaste de mi?-
Pero la mente del maestro ha dejado de procesar cualquier
otra información desde que ha visto al padre de su alumno favorito. El hombre
es tan guapo y bien parecido, que puede jurar que hasta le ha robado el
aliento.
-¿¡Cómo voy a olvidarme de ti!? Salí tarde del trabajo... Lo
siento~-
Se pone de pie mientras observa la escena frente a sus ojos,
sonriendo quedito mientras se acerca con la mochila del menor para alcanzársela
al pelinegro.
-Lo vez Park Junsu~ Tu appa no se había olvidado de ti- ríe
quedito, revolviéndole el cabello al pequeño -Soy el maestro Kim, mucho gusto~-
saluda al padre de su alumno con una sonrisa un poco más brillante.
-Park Yoochun, el gusto es mío- y esa sonrisa que se curva
en los gruesos labios le hacen sonrojar.
Por dios, ¿¡que está pensando!? ¡El mayor es un hombre
casado y con un hijo!
-Lamento las molestias, y gracias por haber cuidado a mi
Junsu mientras yo llegaba...-
-No, no hay de que~ Lo único que me sorprende es que hoy no
haya venido su esposa por él, ¿ella está bien?- cuestiona educadamente y a la
vez un tanto preocupado. Siempre es aquella simpática señora la que recoge al
pequeño a diario; a saber, esta era la primera vez que veía al papá de Junsu.
-¿Mi esposa? Oh, no, es mi prima- el pelinegro ríe, corrigiendo
aquel malentendido, sonriendo al ver ese gesto de repentina confusión en la
cara del maestro -Soy divorciado, mi prima viene por él porque yo trabajo hasta
tarde; pero hoy quise venir por mi cuenta~-
-Oh...- apenas murmura el castaño, conectando esos cabos
sueltos en su cabeza.
Entonces es divorciado, pero, ¿y si tiene una pareja? Con lo
guapo que es, es más que obvio que debe tener una novia o algo. ¿Y si no? ¿Y si
está disponible? ¡Pero por dios! ¡¡KIM JUNSU!! ¡¡No debería estar pensando esta
clase de cosas!!
-Es muy probable que a partir de ahora venga a recogerlo...-
la voz del pelinegro le saca abruptamente de sus pensamientos, e
inevitablemente ha asentido efusivamente con la cabeza.
-Estoy seguro de que Junsu estará muy feliz de que venga
todos los días- sonríe brillante, e interiormente sabe que ha jugado con sus
palabras. Porque van a ser los dos Junsus los que estarán muy contentos de
verle.
-Ha sido un gusto maestro Kim~ Espero verlo de nuevo- y
basta esa sonrisa a modo de despedida para volver a subirle el sonrojo a las
mejillas.
Se despide con la mano, suspirando justo antes de cerrar la
puerta del aula y apoyarse contra la madera.
-Kim Junsu no me digas que ese hombre te ha gustado...-
murmura para sí mismo, reprochándose por haber sentido esas mariposas
revolotearle en el estomago con solo haber visto por primera vez a Park
Yoochun.
~~~~~~
-¿Y ese quién es?- la voz de Changmin llega a los oídos del
castaño, haciéndole voltear al instante para encontrarse de pronto con esos
ojos oscuros que le miran intensamente.
-Es el papá de Junsu~- y no puede evitar esa sonrisa que
tira de sus finos labios mientras alza una de sus manos y saluda desde lejos al
pelinegro -Junsu ah~ Ha venido tu appa por ti~- busca al más pequeño que le
observa con una gran sonrisa brillante apenas le ha escuchado.
-Appa!!- chilla el menor entre risitas, alzando su manita
para saludar a su papá que le espera allí en la puerta de la escuela.
-Si, si, enseguida vas con appa~ Ven que te pongo la
mochila- ríe ante la emoción de su pequeño, poniéndose en cuclillas para estar
a la altura del menor y acomodarle la chompita también -Beso para el maestro
Kim~- pide con una gran sonrisa, recibiendo esos bracitos que se cuelgan a su
cuello y ese sonoro beso que el pequeño y dulce pelinegro le deja en la mejilla
-Aiigoo~ Tan lindo mi Junsu~- ríe quedito, dejando al menor para que vaya al
encuentro de su papá; suspirando risueño al verle llegar con el mayor y
saludarle saltando a sus brazos.
-Y... ¿A ti te gusta el papá de Junsu, no?-
-¿¡¿¡Q-QUE!?!? ¡¡CLARO QUE NO!!- Changmin le ha hecho
chillar de un momento a otro, ¿qué se cree? Diciendo esa clase de cosas que no
son ciertas...
Porque no, no, no y no. El guapísimo y simpático padre de su
alumno no le gusta para nada, ni un poquitito.
-Vamos, está escrito en tu cara. Dice bieeen grande 'Estoy
coladito por el papá de Junsu’... ¿cómo es que se llama?- hace mímicas con sus
manos, preguntando lo último rápidamente.
-Park Yoochun... ¡¡YAAHH!! ¡YO NO DIJE ESO!- y tonto él, cae
justo en esa trampa que el morocho le hace con sus palabras.
-Entonces va así: 'Estoy coladiiito hasta los huesos por el
guapísimo y sexy Park Yoochun'~ Eso traes escrito en mayúscula y negrita en toooda
tu cara Kim Junsu-
-¡¡Y-yo nunca dije que fuera sexy!!- chilla con el rostro
pintado de carmín, sintiendo el calor de la vergüenza acumularse en sus
redondas mejillas.
-Lo leí de tu cara- ríe a carcajadas el menor, quejándose
quedito mientras se limpia las lagrimillas cuando esos golpes comienzan a caer
sobre su brazo.
-¡¡Y-yah!! ¡¡Eres un fastidioso!!-
Intenta defenderse... Pero sabe que lo han descubierto. ¿Acaso
es tan obvio?
~~~~~~
-¡¡Maestro Kim!!- la vocecita chillona del pequeño pelinegro
llama su atención mientras está allí sentado en su escritorio apenas ha sonado
la campana del recreo.
-¿Que pasa mi pequeño?- sonríe al ver esos grandes ojos
negros y esa sonrisa brillante que le regala el menor.
-Mi appa me dio esto, dijo que debo dárselo al maestro Kim~-
ríe orgulloso, sabiendo que es un niño bueno porque ha cumplido con aquel
recado, entregándole un sobre al profesor.
-Muchas gracias~ Te pondré una estrella por haberme
entregado esto y haber obedecido a tu appa- sonríe solo para el pequeño,
sacando de uno de los cajones de su escritorio esos stickers de estrellitas
doradas, tomando una para pegarla en el dorso de la mano de ese emocionado
pelinegro.
-¡¡Yeey!!- chilla el pequeñito emocionado, dando brinquitos
mientras sale a jugar al patio con sus compañeritos.
Los ojos avellana caen entonces en ese sobre; lo abre con
cuidado, sacando esa hoja doblada con un solo mensaje.
"¿Vendrías a cenar con nosotros esta noche?"
Palabras claras y sencillas, acompañadas por esa dirección y
ese número de teléfono que le alteran completamente el corazón.
~~~~~~
-Sr. Park...- saluda al pelinegro apenas este ha llegado a recoger
a su hijo. ¿Cuantos días han pasado desde la primera vez que se han visto? ¿Más
de dos semanas? ¿Casi un mes? No lo sabe; pero en todo ese tiempo que ha pasado
y apenas han tenido pocas oportunidades de hablar, su enamorado corazón no ha
hecho más que empeñarse en latir descontrolado, en hacerle sentir como un
completo bobo que flota en una nube de ilusiones.
Esas ilusiones que de pronto le han elevado mucho más alto
con esa carta que recibiera hace unas horas.
-Dime Yoochun por favor- el pelinegro sonríe, justo después
de haber cargado a su niño entre sus brazos, acomodando esos mechones
pelinegros que caen adorablemente en su carita -¿Has extrañado a tu appa, mi
Junsu?- le pregunta al pequeño con voz mimosa, recibiendo esas risitas
escandalosas de parte del menor.
-¡¡Sii!! ¡Mucho, mucho! Appa, ¡mira! ¡El maestro Kim me dio
una estrellita por darle lo que me diste!- exclama el menor, mostrándole a su
padre su manita con esa brillante estrella.
-Sobre eso...- murmura el castaño, encontrándose con esos
ojos oscuros, profundos; esa mirada que de pronto le cohíbe y le hace sentir
vulnerable e indefenso, como si pudiera leer de pronto todo lo que tiene
fuertemente guardado en su corazón.
-¿Vendrás? De verdad que nos gustaría que nos acompañaras a
cenar, ¿verdad Junsu?- usa esa sonrisa que altera sus sentidos, e involucra a
su adorado alumno en la conversación... ¿¡Cómo puede decirle que no ahora!?
-No creo que...-
-¿¡El maestro Kim vendrá a cenar!? ¡¡Yo quiero que venga!! ¡¡Quiero
mostrarle mis juguetes!!- el pequeño le mira con sus ojitos brillantes y esa
sonrisa cristalina. Y sabe que va a aceptar, porque eso es lo que su corazón
quiere de verdad.
-Si...- murmura con un tenue rubor en las mejillas,
sintiendo como se le va el aire de los pulmones al ver esa brillante sonrisa
que el mayor le regala -Estaré allí esta noche...-
-Estaremos esperando entonces~ Espero que te gusten las
pastas, porque eso cocinaré hoy-
-¡Si!- afirma rápidamente, remordiéndose los labios al caer
en cuenta de su repentina emoción -Me encantan las pastas- sonríe quedito,
apartando la mirada de esos ojos ónix, completamente avergonzado mientras
siente aún más calor sobre sus mejillas.
-Nos vemos más tarde- se despide el mayor, recibiendo un
asentimiento de cabeza por parte del sonrojado maestro, compartiendo un par de
sonrisas antes de irse.
~~~~~~
La tarde ha caído demasiado rápido; camina por esa calle que
tiene indicada en el papel, buscando el número correcto antes de toparse con la
fachada de esa linda y acogedora casa de dos pisos.
Pasa la reja y camina hasta ese par de escaleras que le guían
hacia la puerta principal, tocando el timbre, sintiendo su corazón latir
demasiado a prisa contra su pecho.
-¡¡Ya voy!!- escucha la vocecita de su alumno y no puede
evitar reír quedito al oír esos pasitos presurosos acercándose a la puerta -¡¡Appa!!
¡¡Llego el maestro Kim!!- chilla con algarabía el más pequeño apenas le ha
visto al abrir la puerta.
-Yah~ ¿Así saludas a tu maestro? ¿Eh?- ríe divertido,
tomando en brazos a ese adorable niño que ahora lo llena de besos en las
mejillas, cerrando la puerta tras de sí, caminando apenas unos pasos con el
menor en brazos hasta encontrarse con el pelinegro apenas este se ha asomado
por la puerta de la cocina.
-Buenas noches~- saluda con una sonrisa avergonzada,
obedeciendo a ese ademán que el mayor le hace con la mano para que entre.
-La cena está casi lista, solo me falta servir- el pelinegro
se mira tan contento... Al menos hasta que vuelve a alzar la mirada y de pronto
frunce el ceño.
-Yah, me voy a poner celoso, es mi Junsu, mío~- habla con
los labios fruncidos, dejando a un castaño casi con taquicardia por lo que
acaba de oír.
-Si appa, soy tu Junsu~- ríe divertido el más pequeño,
haciendo que el maestro comprenda la situación.
¡Claro que se estaba refiriendo a su hijo! ¿¡Como rayos es
que se le ocurrió pensar que hablaba de él!? Ese hombre solo sabe su apellido,
y esto de tener el mismo nombre que su hijo de pronto está comenzando a
causarle estragos en el corazón.
-Ahh~- murmura riendo un tanto nervioso, bajando al menor de
sus brazos, revolviéndole el cabello con cariño antes de verle corretear fuera
de la cocina.
-¡¡Voy a traer mis juguetes para mostrarle al maestro Kim!!-
el pequeño les hace saber, antes de desaparecer de su campo visual.
-Cuidado con las escaleras Junsu...- advierte el pelinegro.
Y el otro Junsu, Kim Junsu, no puede evitar el alzar su mirada hacia esos ojos
azabache, esos que le miran acompañados por una sonrisa descaradamente coqueta.
-De verdad quería que vinieras~- sonríe antes de soltar unas
cuantas risitas, coloreándole las mejillas al castaño en cuestión de segundos.
-¿P-por qué?- se atreve a preguntar en un tartamudeo,
retrocediendo involuntariamente cuando el pelinegro se acerca a él un poco más.
¡Dios! ¡Se siente tan indefenso y nervioso en ese preciso
instante! Puede jurar que su corazón late tan fuerte que el mayor va a
escucharlo sin problemas.
-¿Por qué no?- otra sonrisa coqueta, otro flechazo directo
al corazón. ¡Cupido, por favor, ten piedad!
-¿Por qué yo?- cuestiona en un hilo de voz, estremeciéndose
cuando la mano del pelinegro cae sobre su cintura con total naturalidad.
-Porque eres el maestro de mi hijo, y me agradas~ Quizás me
agradas demasiado-
Y no puede pronunciar nada más, su boca se abre y cierra
como pez fuera del agua, mientras su mirada se ahoga en esos vórtices ónix que
le arrastran al vacio. Al vacio en su memoria y todo lo que pueda imaginar,
porque de un momento a otro ha olvidado cualquier cosa que no sea Park Yoochun.
-P-pero...-
-¡¡¡Maestro Kim!!!- y ese chillido agudo le saca
abruptamente de esa burbuja que se había creado entre los dos; ¿¡en qué momento
el pelinegro había terminado abrazándose a su cintura!? ¿¡Cuando se había acercado
tanto!?
-Dime, dime Junsu ah~- sonríe un tanto nervioso, apresurándose
al lado del pequeño, prestándole total atención mientras siente esa mirada
intensa a sus espaldas.
El más pequeño le muestra algunos de sus juguetes, riendo
divertido, completamente contento de que su maestro haya ido a visitarlo.
-La cena está lista~- anuncia el mayor de los tres, llevando
los platos al comedor, acomodando esa silla un poco más alta, hecha
especialmente para su hijo.
Se sientan a la mesa; los ojos del castaño se han iluminado
al ver ese platillo de pastas con albóndigas.
-Se ve delicioso~- canturrea con una gran sonrisa, encontrándose
con las miradas de ambos Park. Notando en ese preciso instante su parecido. Se
le hace tan adorable la manera en que ambos tienen los gestos muy parecidos.
-¡Esta delicioso!- ríe el más pequeño, habiendo llevado ya
un primer bocado a su boquita.
-Espero te guste- Yoochun sonríe.
Y, oh si, al parecer esa sonrisa iba a encargarse de
alterarle hasta la última fibra del cuerpo durante su estadía en aquella casa.
~~~~~~
La cena estuvo deliciosa, las conversaciones amenas y
aquellas ocurrencias del pequeño Junsu que lograban arrancarle a los mayores
más de una sonrisa.
Decidieron pasar a la sala a seguir hablando y jugando con
el más pequeño, hasta que eso que no pensó que pasaría, estaba a punto de
ocurrir.
-Llevaré a Junsu a su habitación- informa el pelinegro,
cargando en brazos a su hijito, ese al que ya se le cierran los ojitos por
culpa del sueño.
-Bien...-
Aquel murmullo apenas fue audible; de pronto siente su
corazón de nuevo a mil por hora, ¡¡va a quedarse solo con Park Yoochun!!
¿Y si ocurre de nuevo algo parecido a lo que pasó en la
cocina? Debe hacer algo, no puede quedarse allí sentado nada más. Está seguro
de que si se queda en ese sofá va a convertirse en la presa indefensa.
Se pone de pie, caminando hacia la cocina, tomando esos
platos sucios para llevarlos al lavabo y ayudar al pelinegro con eso.
-Yah... No tienes que hacerlo...- esa voz grave llega a sus oídos
haciéndole voltear, encontrándose con el mayor apoyado en el marco de la
puerta.
-Está bien~ He causado ya muchas molestias- balbucea con una
pequeña sonrisita, volviendo la mirada a esos platos cubiertos de espuma para
impedir que el mayor vea ese sonrojo que sabe se le ha pintado en las mejillas.
Solo se puede escuchar el sonido del agua corriendo en el
lavabo, se sumen en ese silencio un tanto incómodo, hasta que los pasos del
mayor resuenan también en medio de aquel momento de quietud.
¿A dónde camina? ¿Que está haciendo? Se pregunta a sí mismo,
sin querer voltear, sin querer mirarle porque sabe que lo único que va a
provocarse a sí mismo es una taquicardia y esas inmensas ganas de mirar al
mayor como bobo enamorado.
Y de pronto los pasos se detienen justo detrás de él, le
siente tan cerca que su corazón ya ha comenzado a latir como loco, y esas
manos, ¡¡dios!! ¡¡Esas manos que ahora se cierran en su cintura!!
-No...- murmura en un hilo de voz, sintiendo como el rostro
le arde en vergüenza. Sintiendo como todo su cuerpo se estremece al sentir ese
cuerpo masculino y varonil tan cerca al suyo.
-Me dices que no, pero no te opones... Solo te sonrojas cada
vez más- sonríe el pelinegro, apoyando la cabeza en el hombro del castaño,
abrazando esa delgada cintura con un poco más de recelo.
-Es vergonzoso...- se justifica con un murmullo, cerrando la
llave del agua antes de apoyar sus manos al borde del mueble -¿Por... Por qué
eres así conmigo?- pregunta en voz baja, aún tenso en medio de aquel abrazo.
No entiende nada, su cabeza no da para tanto cuando lo único
que su cerebro logra procesar son esos fuertes brazos alrededor de su cuerpo,
ese aliento que choca con su cuello y el calor del pecho del mayor contra su
espalda. ¡Se siente en el cielo, en el mismísimo cielo! ¿Pero esto está mal,
cierto? ¿¿Cierto??
-Me gustas~ Me gustas maestro Kim... Me gustas Kim Junsu~-
Y solo eso, solo eso basto para hacer que el castaño gire
entre sus brazos y se enfrente a esa mirada oscura y profunda como el universo.
-Cómo sabes que... Yo, ¡yo nunca te lo dije!-
-No lo hiciste, pero yo ya sabía tu nombre desde mucho
antes-
-No entiendo nada...- balbucea aferrando sus manos en la
camisa del mayor, a la altura de su pecho, sintiendo como la confusión
repentina se le arremolina en el cuerpo, le hace sentir extraño y tonto. ¡Pero
no comprende!
-No me sorprende que no te acuerdes de mí... Solo fui un
cliente más en esa tienda- comienza a hablar el mayor, sin haber soltado al
castaño, aún abrazándolo por la cintura -Hace casi 5 años, un día fui a una
cafetería, estaba molesto por algo que ya olvidé, pero seguramente tenía que
ver con mi ex esposa. Un chico me atendió, parecía universitario aún, y no
dejaba de sonreír; atendía a todos con gusto y le contagiaba su alegría a quien
le mirara. Le pedí un café y ¿sabes que me trajo?- va contando y cuestiona lo
último, dándole una oportunidad al menor a ver si recuerda un poco de lo que le
está hablando.
Junsu no puede creerlo, está hablando de él. De él hace 5
años, cuando tenía un trabajo de medio tiempo en una cafetería cerca al centro
de la cuidad.
Y de pronto todos los recuerdos pasan como flashes en su
cabeza, ese hombre de largos cabellos azabache, amarrados en una cola; con el
ceño profundamente fruncido y la mirada perdida...
-¿Lo recuerdas Junsu ah?- Yoochun pregunta en voz baja,
llevando una de sus manos hacia esa colorada mejilla, acariciándola despacio
mientras pacientemente espera una respuesta.
-Te di... Chocolate caliente- murmura apenas, sintiendo como
su corazón late con fuerza contra su pecho una vez más.
-¿Y recuerdas qué me dijiste entonces?- cuestiona con una
amplia sonrisa, estrechándole otro poco, sintiendo como ahora son los brazos
del menor los que de pronto se cierran en torno a su torso.
-'El café solo va a amargar tu día otro poco, el chocolate
te hará sonreír... Y si no lo hace... Tendré que encargarme de ello personalmente'-
ríe quedito en las últimas palabras, habiendo citado exactamente aquello que
dijera hace ya bastante tiempo -Y te reíste... Sin siquiera haber tomado un
sorbo del chocolate-
-Jamás pensé que iba a volver a encontrarte...-
-Tu cabello era largo entonces, no te había reconocido por
eso...-
-Le puse a Junsu así por ti... Para no olvidarme de ese
rayito de sol que me alegró mucho más que un simple día~- confiesa el
pelinegro, buscando esos ojitos avellana que ahora le miran con un poco más de
confianza, pero la misma cantidad de vergüenza.
-¿De verdad?- murmura apenas, sin poder evitar esa sonrisita
que se pinta lindamente en sus rosados labios, haciendo juego con su intenso
sonrojo.
-De verdad Kim Junsu~ Y de verdad me gustas también... Creo
que me gustaste desde aquella vez-
-¿Pero cómo? Si estabas casado...- cuestiona sintiéndose de
pronto más ligero, con el corazón latiendo a tropel allí dentro de su pecho, repitiéndole
en cada latido que esto es un sueño, pero a la vez gritándole que es una
hermosa realidad.
-Estaba~ Y nadie había ocupado antes mi corazón de esta
manera...-
-¿Me contarás la historia completa Park Yoochun?- su voz
escapa esta vez un poco más cantarina, más contenta y tan emocionada como
realmente está en ese preciso instante.
-¿Está bien si te la cuento después?- la sonrisa del
pelinegro le hace reír otro poco; no sabe cómo, pero en cuestión de unos
minutos siente como si se hubiera reencontrado con un amor del pasado, uno que
no ha olvidado y le corresponde.
-Después entonces~- el castaño sonríe, muy consciente de lo
que viene a continuación.
Alzando sus brazos para abrazarse al cuello del pelinegro en
el preciso momento en que sus labios se buscan para compartir ese dulce primer
beso.
Conociéndose lentamente, probándose con suma paciencia en
medio de ese contacto cargado de una mezcla sinfín de sentimientos.
-Quédate Junsu ah...- pide el mayor apenas han separado sus
labios solo un poco. Las orbes avellana se encuentran pronto atrapadas por esas
más oscuras; hipnotizadas, ahogadas en ese mar de infinitas sensaciones que
solo esa profunda mirada le provoca.
Y no puede responderle con su voz, solo busca una de las
manos de Yoochun para entrelazarla a la suya y, alzándose ese par de centímetros
que le faltan para alcanzar al mayor en estatura, le topa los labios en un beso
corto pero con mucho significado.
~~~~~~
Han subido las escaleras muy despacio, tomados de las manos
sin querer hacer el más mínimo ruido para no despertar al pequeño que duerme en
su cuarto.
-Yoochun~- esa risita apenas audible escapa de los rosados
labios en el momento justo en que el mayor lo apresa contra la puerta de su
habitación; asegurándose de ponerle el seguro a la puerta antes de volver a esa
boca dulce que ya se ha vuelto su adicción.
Sus sonrisas se encuentran en medio de aquellos besos, en
medio de todas esas caricias furtivas que se apasionan con cada segundo que
pasa.
-Nhh...- y ese primer jadeo que se ahoga contra la boca del
pelinegro solo les incita a ambos a subir la intensidad de sus acciones.
Los dedos del pelinegro se aferran a la delgada cintura,
acarician los costados sobre la fina tela de esa camisa que el menor trae
puesta e incluso se atreven a tironear un poco de ella para hacerse espacio y
poder colar sus manos traviesas por debajo y tocar a sus anchas la piel
desnuda.
-Es... Espera- balbucea el castaño, sintiendo varios
estremecimientos recorriendo su cuerpo con cada uno de esos roces confiados.
-Ya esperé demasiado- una sonrisa picara se curva en los
gruesos labios -Tuve que aguantar las ganas de comerte a besos la vez que te
volví a ver, en la escuela~- confiesa descendiendo con húmedos besos sobre el
contorno del cuello ajeno.
-Mmh~ Yo reprochándome por nnh~ pensar que eras demasiado
guapo... Y tú ya querías hacerme... esto~- resopla antes de que esa sonrisa
ligeramente divertida tire de las comisuras de sus labios.
-¿Te gusté desde ese día?- cuestiona el mayor con una ligera
sonrisa, volviendo su rostro a la altura del castaño por un momento.
-Cómo el papá de Junsu... Si~- murmura llevando sus dos
manos hacia ese rostro masculino que tiene en frente -...Como el cliente de esa
tienda me gustaste mucho antes- remuerde sus rosados labios, suspirando risueño
al recibir esos nuevos besos que le alteran el corazón.
Las manos del pelinegro buscan los botones de la camisa
ajena, deshaciéndolos despacio mientras se libra una batalla dentro de sus
bocas. Sus lenguas se chocan, se enredan la una en la otra; ahogan jadeos
contra los labios del otro y sienten en medio de aquel contacto ese sentimiento
que los une irremediablemente.
-Nnhg~ Chun~- jadea apenas sus bocas se han separado,
sintiendo sus piernas temblar cuando ahora los besos comienzan a caer desde su
clavícula hasta su pecho; y tiene que sujetarse fuertemente de los hombros
ajenos para no terminar resbalando por culpa de esos escalofríos que le
recorren todo el cuerpo.
Los gruesos labios marcan toda esa nívea piel, se apropian centímetro
a centímetro de ese cuerpo febril que se estremece bajo las ardientes caricias.
La camisa del menor ha terminado en el suelo y las manos del pelinegro no han
tardado en subir hacia la espalda desnuda para reconocer esos nuevos terrenos
de tersa piel.
-Yoochun~- balbucea sin aliento, enredando sus brazos detrás
del cuello ajeno cuando el mayor ha vuelto a su boca para besarle un poco más
-Lle... Llévame a la cama...- murmura remordiendo suavemente sus labios, siendo
consciente de que el sonrojo que trae en las mejillas se ha intensificado un
poco más.
Y ha bastado esa petición para que Yoochun sonría completamente
contento, alzando en vilo al castaño, caminando a tientas hacia la cama
mientras recibe esos besos que son dejados fervientemente sobre sus gruesos
labios.
-Me encantas... Me encantas Junsu ah~- susurra apenas se han
dejado caer sobre el colchón, habiéndose apartado de los rosados labios solo
para mirarle mientras se acomoda sobre el cuerpo ajeno.
-Siento que mi corazón va a estallar...- murmura el menor en
respuesta, sonriendo quedito, dejando que el pelinegro vea todo ese color carmín
que se ha arrebolado en sus mejillas. Las finas manos buscan el cuello de la
camisa del mayor, deslizándose hacia los botones para deshacerse de ellos como
puede; y pronto la camisa ajena también ha caído al suelo.
Los dedos de Junsu recorren la piel que tiene al alcance, se
deslizan desde el cuello hasta los hombros, entrando por las clavículas hasta
posarse sobre ese amplio pecho desnudo que se siente caliente bajo su tacto.
-¿Me besas un poco más?- pide en un balbuceo, perdiendo su
mirada en esos ojos oscuros y profundos como el mismísimo universo, sintiendo
como le absorben, como se ahoga en ellos.
Y no tiene que responder verbalmente a esas palabras; ha
dejado caer sus labios contra los más finos, besándole lento y acompasado,
explorando a su gusto esa dulce cavidad cuando el menor ha accedido a
profundizar ese beso. Sus lenguas se encuentran, se enredan la una en la otra y
pelean por el dominio de aquel apasionado contacto mientras sus cuerpos se
remueven, buscando una manera de estar mucho más cerca, aunque la distancia sea
nula.
-Mmhg~ Ahh~ Chuuun~~- gime cuando sus labios se separan,
sintiendo esa presión que el mayor hace en su cadera, dejándole sentir que no
es él único al que se le ha subido la emoción en cuestión de segundos.
-Nnhh Junsu~- su voz escapa gruesa y ronca, mientras aumenta
solo un poco esos movimientos sinuosos contra el cuerpo del castaño.
Yoochun ha vuelto a dejar caer sus besos a lo largo del
cuello del menor, dejando un par de marcas rojizas cuando succiona la nívea
piel bajo sus labios. No se detiene, continúa con su camino de caricias por en
medio del pecho hasta hacerse con su boca de uno de esos pezones que reaccionan
al instante a sus morbosas atenciones.
-¡Nnhg! ¡Yoochun! Allí... No~- jadea ahogado, remordiéndose
los labios mientras una de sus manos cae instintivamente sobre los mechones
pelinegros del mayor; ya ni siquiera sabe porque niega, si le están encantando
esos tratos que el mayor deja sobre su cuerpo.
El mayor se preocupa por atender ambos montecitos, turnándose
en las caricias que deja con sus labios sobre ellos antes de continuar con su
camino hacia el sur. Le besa por el abdomen, desciende hasta encontrarse con
ese pequeño y perfecto ombligo que no duda en profanar con la punta de su
lengua juguetonamente. Ha notado esos vellitos un poco más oscuros que trazan
un camino perfecto hasta perderse bajo los pantalones ajenos; pero no puede
evitar besar sobre ellos hasta llegar al borde de aquella prenda.
-¿Sigo Junsu ah?- la voz ronca y excitada del mayor llega a
los oídos del castaño, haciéndole temblar y removerse bajo ese cuerpo que ha
vuelto a trepar sobre el suyo para alcanzarle los labios.
-Es vergonzoso...- Junsu murmura con las mejillas tinturadas
a tope, abrazándose con un poco más de recelo al cuello ajeno, como impidiéndole
que baje a besarle más al sur porque siente que podría morir de vergüenza. Pero
aún así asiente quedito, aflojando solo un poco el agarre para que el pelinegro
pueda hacerse del botón y el zipper de su pantalón.
Le ha dejado en bóxers en cuestión de segundos, habiendo
aprovechado la acción de quitarle los pantalones para deslizar sus manos por
sus torneadas piernas; una brillante sonrisa se expande sobre los gruesos
labios de Yoochun apenas ha sentido esos brazos ajenos soltándole para dirigir
sus manos titubeantes a hacer lo mismo que él ha hecho, soltando la hebilla de
su cinturón antes de hacerse del botón y el zipper.
-Quítalos...- pide el menor, sintiéndose torpe cuando empuja
la tela y por la posición apenas logra bajarle los pantalones hasta los muslos;
alzando un poco su rostro para besar al mayor solo porque si.
Ambos cuerpos semi desnudos se enredan allí sobre la cama,
se abrazan con recelo apenas han quedado en las mismas condiciones. Sus bocas
se mantienen unidas en besos entre largos y cortos, dulces y apasionados;
aquellos que solo apaciguan un poco de ese calor sofocante que se apodera de
sus cuerpos.
Las caricias continúan, los toques y los besos que combinan el
deseo con ese amor que brota desde sus corazones.
-Yoochun~ ¡Nnh!- los jadeos del castaño chocan contra los
gruesos labios, se pierden en la boca ajena mientras comparten el aliento y no
dejan de mirarse.
Las últimas prendas han llegado al suelo, sus cuerpos se
mantienen muy juntos, abrazados con recelo mientras comparten más de aquellos
besos; es como si quisieran darse todos los que no pudieron en estos años que
han pasado desde la primera vez que se vieron.
-Yoochunnie~- un pequeño gemido incómodo llega a los oídos
del pelinegro mientras le prepara con sus dedos -No pares...- pide el menor al
sentir como Yoochun detiene poco a poco sus movimientos, con aquel gesto de
preocupación en el rostro -Estoy bien~ Hazme tuyo, ¿si?- pide en un susurro,
buscando con sus finas manos el rostro ajeno para atraerle y continuar besándole,
distrayendo esa incomodidad en su intimidad hasta que los toques del pelinegro
le tienen ahogando gemidos de placer.
Sus cuerpos se funden en uno solo, se poseen el uno al otro
mientras aún se abrazan con recelo.
-Junsu ah~ Quédate conmigo- pide entre suaves besos, esos
que sirven para distraer al menor mientras se acostumbra a tenerle dentro
-Quédate conmigo y mi Junsu- riendo ante aquello último.
-Esto de llamarnos igual va a ser un problema- el castaño
deja escapar una risita, abrazándose otro poquito al cuello ajeno, tirando de
él para dejarle piquitos contra la gruesa boca -Quiero quedarme contigo Yoochun
ah, contigo y con Junsu~ Pero... ¿estás seguro que está bien?-
-Claro que está bien... te quiero en mi vida, quiero estar
contigo... Te amo- confiesa el mayor con una nueva sonrisa, provocando en Kim
Junsu un estallido de fuegos artificiales justo en su corazón.
-Te amo- sonríe brillante, muy seguro de que quiere quedarse
con este hombre que le robó el corazón hace unos años y volvió a hacerlo hace
un par de semanas.
Y en medio de nuevos besos retoman su acto de amor,
comenzando con aquella danza de caderas, acompañada por sus voces en jadeos y
gemidos; haciendo el amor por primera vez. Se aferran el uno al otro, se besan,
se tocan, se desviven por explorarse mutuamente y mueren en placer con cada
choque de sus cuerpos, con cada delicioso contacto de sus anatomías febriles y
sensibles al mínimo roce.
-¡¡Allí!! Nnhg Chunnie~ Más~- el menor pide sin una pizca de
vergüenza, intentando cubrir su boca con una de sus manos porque sabe que está
siendo escandaloso y no pueden despertar al pequeño.
-No... nnhg no te cubras- habla el pelinegro.
-Pero ¡mmhg! Esquee ¡ahh! AAHH- intenta justificarse, siendo
callado por la boca del mayor cuando ha tocado en su interior su punto más
sensible y su voz se ha alzado demasiado. Yoochun ha descubierto que ese es el
lugar favorito del castaño, y no va a dejar de embestirle hasta hacerle tocar
el cielo con los dedos.
Se dejan llevar por aquel remolino de sensaciones, por ese vórtice
de placer que los arrastra al aparatoso final; sus cuerpos se enredan, se
aferran con recelo entre respiraciones agitadas y corazones a mil por hora, un
par de sonrisas que se rozan en pequeños y suaves besos, apaciguando esas
llamaradas de fuego que mantenían encendidos sus cuerpos.
-Ya es tarde, quédate a dormir...- murmura el pelinegro,
acomodando con una de sus manos esos mechones castaños que han quedado
desordenados sobre la frente ajena.
-Junsu se dará cuenta mañana, Yoochun ah-
-Pero no le parecerá algo malo... siempre me habla de ti
desde que comenzaste a ser su maestro, te quiere tanto como yo~- sonríe
sinceramente -Estoy seguro de que le encantaría la idea de que te quedes con
nosotros- intenta convencerle, sintiendo su corazón latir alocado una vez más
al recibir un asentimiento a cambio.
Unas cuantas risitas compartidas, un beso cargado de amor y
promesas de un nuevo futuro, juntos.
~~~~~~
-¡¡Maestro Kim!!- ese chillido emocionado por parte del
pequeño Junsu le hace girar al instante, solo para encontrar al menor con su
pijamita, recién levantado de la cama con sus cabellitos revueltos, mirándole
con una sonrisa enorme y muy feliz.
-Buenos días mi pequeño~- sonríe también, cargándole al
instante para recibir esos besitos en su mejilla y esos bracitos que se cierran
alrededor de su cuello.
El castaño estaba preparando dos tazas de café y ya había
servido un vaso de leche chocolatada para el más pequeño.
-Buenos días- saluda el pelinegro, entrando a la cocina,
besando en la frente a su hijito antes de topar los labios de ese Junsu que no
puede evitar la sorpresa en su rostro.
-¡¡Yoochun!!-
-¡¡Appa!!-
Ambos chillan al unísono y el mayor no puede hacer más que reír
divertido, acercándose para cargar a su niño y sentarlo a la mesa de diario, extendiéndole
su taza con leche chocolatada.
-¿Appa porque el maestro Kim se ha quedado a dormir? ¿Y y
por que trae tu pijama? ¿Appa porque le has dado un beso al maestro Kim?- y
todas esas preguntitas caen una tras otra en ese tonito curioso que solo hace reír
a los mayores -¡Appa! ¿El maestro Kim va a ser mi umma?- cuestiona aquello
último poniéndose de pie sobre su silla, tirando del brazo del pelinegro,
alzando sus manitas para que lo cargue.
Junsu se ha quedado mirando la escena, él... formando parte
de aquella pequeña y adorable familia; suena hermoso.
-¿Quieres Junsu ah?- cuestiona el castaño, acercándose a los
dos Park -Yo quiero mucho a tu appa... y también te quiero mucho a ti~-
confiesa, tomando la mano del mayor cuando se la ha extendido, dejando que le
atraiga hasta abrazarle la cintura.
-¿Appa, el maestro Kim puede ser mi umma?- pregunta
inocentemente el más pequeño, como si pidiera permiso para aquello, sonriendo
contento cuando Yoochun le ha dicho que si, estirando sus bracitos para
lanzarse al cuello del castaño.
-Junsu- habla el pelinegro, riendo al ver como los dos
menores giran a verle al instante -Los amo- sonríe, volviendo a dejar un beso
sobre la mejilla de su bebé y otro sobre los labios de su, ahora, novio -Amo a
mis dos Junsus preciosos- compartiendo risitas entre los tres... hasta que el
más pequeñito les ha interrumpido.
-¿¡El maestro Kim se llama Junsu también!? ¿¡Como yo!?-
Definitivamente un comienzo bastante extraño y divertido
para esta nueva familia.
Un amor que nació con una taza de chocolate hace años y a
pesar del tiempo floreció cuando sus corazones se reencontraron.
Quién diría que serían dos Junsus los dueños del corazón de
Park Yoochun.
*FIN*
Dejar un comment no cuesta nada~~ ♥
(De verdad, de verdad que apreciaría siquiera un comentario chiquitito en este shot, digamos que hace meses que no escribo y quiero saber si ha sido de su agrado. Cosas como estas me motivan a seguir♥)
MIL GRACIAS POR LEER! ♥♥♥
(De verdad, de verdad que apreciaría siquiera un comentario chiquitito en este shot, digamos que hace meses que no escribo y quiero saber si ha sido de su agrado. Cosas como estas me motivan a seguir♥)
MIL GRACIAS POR LEER! ♥♥♥
Ha sido tan bonitoo! imaginar al pequeño Junsu todo bonito junto a Junsu <3, nono siempre he pensado que Junsu se ve hermoso rodeado de pequeñitos -quizá porque Susu es todo un bebesito que se entiende con los pequeños -.
ResponderEliminarY! sdfadfadsfas Chun guapo que anda allí conquistando el corazón del maestro Kim! yy nada! que Susu ni enterado que ya le había robado el corazón a Yoochun desde hace mucho tiempo. adsfasdfasdfads si es que ellos estaban destinados a estar juntitos! <3 <3
Ha sido tan lindo Axy <3 <3 *^* gracias por volver con tus historias hermosas!!! *la apachurra*, estaré esperando por más Yoosu bonito <3
Awwwwww~ cosos adorables los dos Junsus xD! Hace mucho que no leía una de tus historias, pero me ha encantado... entretenida, adorable y romántica... una mezcla perfecta... :)
ResponderEliminarMe alegra que estés bien y que podamos leerte más seguido...
precioso !!!!!!!!!!!!!!!! me derretí de ternura ,muchas gracias por publicarlo
ResponderEliminarMe encanto! como siempre haces con cada publicación!!! Me alegro un montón que sigas publicando cosas!!!
ResponderEliminarUn saludito desde Canarias!!!!
Awwwww fue hermoso. Axy hiciste un gran trabajo, nos emocionaste como siempre.
ResponderEliminarLa historia es hermosa de imaginarme al pequeño Junsu con Yoochun y el otro Junsu awwwww <3
Muchas gracias Axy por regalarnos este hermoso shot y bienvenida de vuelta. ^^
Saludos desde México
Oh eso fue hermoso me encanto como siempre un gusto leerte te comento en un concierto a JunSu le empezaron a decir baby o Su pero el contesto no baby no Su no es SuSu ahora Chunnie ya sabe como ponerle
ResponderEliminarFue maraviloso!!! *-*
ResponderEliminarMuchas gracias por compartir, escribes hermoso como siempre :D
AAWWW!!! Llegue yo! con mis comentarios Homosexualmente Gays!! ♥♥♥ Estuvo hermoso!! *--* Me recordo un Fic que lei ya hace un tiempo ~~~ ♥3♥ Estuvo muy lindo ~~ ♥♥
ResponderEliminarYoochun porque eres tan perfecto??? Junsu porque eres tan tierno?? Aunque definitivamente ahora va a competir contra su hijo por ver quien es mas tierno xDDD ♥♥
Gracias por el Fic!! Axy definitivamente se te extrañaba ♥♥ Muy hermoso y Gay xD ♥♥
Graiaaas!! Y ¡¡Animo!! ♥♥
Ay! Axy hermosa te mereces todos y cada uno de los bellos elogios de la gente <3
ResponderEliminarMe encanta leer cada cosa bonita que escribes ^^! Nada mejor que lindo yoosu para alegrarle el día a tus fans (?)
Muchas gracias por seguir complaciendo con tus escrituras a tanta gente y mucho Aniimo para el 2015 <3
Lin~
Awww cuánta ternurita!
ResponderEliminarAunque confieso que me habría encantado mpreg para que fuera un baby de ambos, sangre de su sangre *-* pero bueno, Junsu bb es tan hermoso como Junsu baby xD par de cosos que le harán tener diabetes a Yoochun por ser taaaan tiernitos~
Estuvo muy bonito el shot! Taaan meloso que a mí tbn se me subió la azucar xD y el momento lemonoso muy romántico *---*
Bienvenida~ *le entrega el trono de Diosa del YS (?)* xD ahora tienes que ejercer ciertas responsabilidades ahí, el mundo de los fics necesita que alguien como tú le de muuucho amor besho y lemonoso YooSu~
Fighting!
aaaaaaaaaaaaaaaaaaawwwwwwwwww me derrito me derrito... aaawww es q los 3 son unas cositas hermosas *w*
ResponderEliminarsuertudote chunnie q tiene dos Su ^^ en serio me parecio muy tierno esto del reencuentro y como Susu se nos ponia todo nervioson cuando Chunnie iba al nido x su hijo XD
me alegro un monton q estes volviendo a escribir ^^
¡Axy! ¡Axy! ¡Axy! Alñsdfklñkfo´wejgoweakdñlaksflsñkañ.
ResponderEliminar¡Había extrañado tanto tus fic's!;;. Está precioso, y me emocioné tanto, tan amoroso y tierno y romántico y fñlsakdñakña.
Fue bastante lindo, de todo un poquito♥.
Ay, en verdad, bienvenida de regreso, la espera que todas hicimos con paciencia para esperarte ha valido la pena, dlkañlñda.
Muy lindo fico, precioso, siempre logras traspasar los sentimientos, y eso es realmente hermoso♥.
Gracias, gracias. Ánimo y suerte en todo, y nuevamente gracias ;__;♥.
♡ ●﹏● ♡ -llora como desquiciada- Pues ¿qué puedo decir? Me enamoré, realmente me enamoré, lo juro~ Awwwww, tanto tiempo de espera valió totalmente la pena. Por favor~ No desaparezcas ni dejes de escribir nunca~ El YooSu necesita de ti lml. Larga vida al YooSu y a Axy~ Pd: Dejé un charco de baba cuando leí la escena de amorsh(? u///u akhdak Park.. eres tan jodidamente sexy ಥ_ಥ ❀◕‿◕❀
ResponderEliminarToT!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Axy que bueno es tenerte de vuelta, y con un YooSu tan perfecto!!!!!!!!! muero de amor *0*!!!!
ResponderEliminarFue hermoso, completamente hermoso y perfecto, una idea muy original, me encanto, lo ame, lo ame ♥_♥
Y el lemon fue woooooo, tan lleno de amor ♥_♥
Enserio, me gusto tanto, disfrute mucho el leerlo, todo, todo me gusto, ojalá no hubiera terminado tan pronto *o*, es que fue tan hermoso ♥
No me esperaba que lo hubiera conocido desde antes, y fue tan lindo como se enamoro de él, jajajajajaja y Junsu se enamoro dos veces de él porque al principio no lo reconoció, jajajajajajaja Cupido no puede tener piedad con el YooSu hermoso, se aman!!! no importa cuánto tiempo pase, están destinados ♥_♥
Mil gracias Axy!!!!!!!!!!!!!!!
Owww estuvo muy lindo encanto, Junsu muy tierno como siempre y Yoochun el galán de galanes xD me encanta el Yoosu ... Y el bb Junsu tan inocente ... Ya me los imagino como familia, definitivamente Hermosos!!!
ResponderEliminarMe encanto este shot súper lindo <3 <3 <3
*Luz.
Asdassasdaasaas!!!! Kya!!!!
ResponderEliminarAy, mi kokorito!!!!! Esta hermosho!!! Esto es algo nuevo, dos Junsus, xD hasta seguí imaginando al terminar de leer. 8D
YooSu es amorsh!!!! Sigue escribiendo, creando hermosas historias. ♥♥
Fighting!!!!! *-*/
≈katty
Lo leí desde la noche en que lo publicaste but el cochino y mugroso fon no deja comentar y ahora hago comentadero LOL
ResponderEliminarSDHAGJYHASGDHASGDHASFGHDASFGDHJFSAGDFASGDSAFDGFSADGFSGDFSAGDFGASDHSGADHGSADHFGSADHFSHGADFGSAFDGSAFDGSAFDSAHDFASGJDFGSAFDGSAFDGSAUDYUSAGHDHSGFAHDGSAHDB♥ Antes que nada #AXYISBACK~ BACK, BACK, BACK, BACK~ —canta como Sherlock de SHINee (?)—.
Lo amé~ Lo amé~ Un bebé JunSu y un Maestro JunSu y me morí de amor con el area de los Tulipanes y los Girasoles y JUNSU DEBERÍA SER PROFE DE PREESCOLAR *^* Se vería muy kawai desu ne~ Con el titulo imagine una cosa TOTALMENTE diferente~ Soy una maldita pervertida ;3; Bueno ya mucho rodeo~ GDSHAGDHSAGDHASGDHSGADHASGDHGSAHD♥ No sé, estoy muy emocionada~ Desde el inicio me gusto todo bonito y así, después como cenaron juntos y se amaron todos sjhadfvjahgsfdgasfdgsfadgsfagdhjf♥ Y el chibi JunSu~ My god que cosa tan más tierna >3<
Gracias~ Has hecho que fangirlee de más y así, lo amé~ Amé tu regreso y demás~ Gracias por este ficsito >3<♥♥♥♥~
Axy!!
ResponderEliminarMe vas a matar con el shot!!
Adoré la historia, Yoochun tan encantador y caballero como siempre sdfgfdsafd <33
Me has sorprendido, a decir verdad, no creí que habría lemon pero luego ...!! Tan apasionados y románticos ambos... Aunque ese momento en el que decidían si vivirían junto en pleno...*cof cof*
JAJAJA me sorprendiste!
... Y el junsu baby! Awh.. Una ternurita de niño! Me lo imaginé como el Junsu peque de algún show... ¿Cómo se llamaba? XD
En fin, Me encantó la historia, muy bien hecha... Tan bonita y original... Te felicito *u*
Holii soy nueva xD
ResponderEliminarPero vieja lectora lel
No habia comentado antes!
quedo muy lindo y ame el limon fue hot pero tierno!
Quiero que escribas mas, ademas ay un fic que has dejado sin terminar estocolmo creo?
y el otro es que por favor terminalos :3 son hermosos!!!
Escribes lindooo
Gracias por este pedacito de yoosu que me as brindado que me hacia falta xDDD
precioso, precioso, precioso!!!! me encantó este fic, super romántico, genial. Estoy feliz de que hayas vuelto, extrañaba mucho tus fics (se seca las lágrimas), me encanta el yoosu con un Junsu tierno y un Yoochun coladito por Junsu. Ojalá un día puedas continuar el fic Estocolmo
ResponderEliminarkyaaaaaaa lo ame, lo ame, lo AME!!!! aaaw tan tierno~ Junsu siempre todo sonrojado y el ratón tan coqueto y caballeroso :3 Me encanta tu escritura >ω< Ame cada pedacito del shot <3
ResponderEliminarMuchas Gracias por volver!!! *W*
Que hermosura de fic, me encantó. Espero que puedas continuar publicando estas lindas historias. Que ternura me dieron los dos Junsus <3, Yoochun es muy afortunado. Me gustan mucho este tipo de historias, adoro como lograste transmitir toda la ternura de pequeño Junsu y también lo lindos, coquetos y apasionados que son el Yoosu. Gracias por publicar ^^
ResponderEliminarAxyyyyyyyyyyyyyy volvisteeeeeeeeeeeeeeeeeeee y yo me di cuenta tarde *se patea ella sola*, muchas gracias por volver y por darnos estas historias tan shenas de amor ;--; me encantó esta historia, tal vez porque soy maestra de jardín y me identifiqué, también quiero encontrarme un Yoochun D=
ResponderEliminarNEeeeeee fue tan hermoso axy .. *-* ame a esos dos junsus hermosos. una mini version de mi susu. Amo a ese park yoochun varonil y salvaje. que debo hacer amo tus fics . De verdad mil graxias por regresar.
ResponderEliminar*adrilloveyou*
Owww tan lindos amo el yoosuuuu quiero seguir leyendo más y más fics me encantaaaa, sigue escribiendo así *_*
ResponderEliminarOwww tan lindos amo el yoosuuuu quiero seguir leyendo más y más fics me encantaaaa, sigue escribiendo así *_*
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