domingo, 5 de agosto de 2012

(FIC) Secretos en Japón *Capítulo 4*

Actualización después de mil años~ En serio lo siento por la demora D':
Alargué un poco las cosas y aún falta el último capítulo más un epílogo para no dejarlas con la curiosidad de saber como les fué en sus viajes a los demás ;D

Me disculpo nuevamente y espero que lo disfruten~




Capítulo 4: Dime la verdad


El pelirrojo quedó demasiado atontado como para hilar las cosas en su cabeza. Ese beso le sabía a gloria y no sabía en qué momento había enredado sus brazos en el cuello del mayor.

-Espera, ¿qué?- le detuvo cuando sus neuronas (algo tardías) lograron procesar toda la información.

-Yo quería hacerlo bien Junsu, quería acercarme despacio y decírtelo confiado. Me gustas, me encantas. ¿Pero por qué diablos has tenido que ponerte en ese plan desesperado? ¡Tiraste todos mis intentos de ser dulce a la basura!- el pelinegro se quejó con tono frustrado mientras le acariciaba las mejillas. El gesto confundido del menor no cambió.

-…que yo te… ¿qué?- su corazón tamborileaba emocionado en su pecho, sus mejillas estaban coloradas y no podía creer lo que estaba escuchando.

El pelinegro sonrió ante su gesto incrédulo y le dejó un piquito en los labios antes de responder.

-Tú. Me. Gustas- dijo enfatizando cada palabra, mirándole detenidamente esperando su reacción.

-…Pe-pero… ¿en qué momen…to?- la voz de Junsu se quebró en la última palabra y la vista se le nubló por culpa de las lagrimas –Idiota!- chilló golpeándole el hombro con una de sus manos, cubrió su rostro y comenzó a llorar –me la paso todos los días pensando en ti- sollozó acercándose lo suficiente como para hundir su rostro en el pecho de su amigo –maldiciéndome por dejar que mi corazón vaya de prisa al verte- siente los brazos del pelinegro acomodarse en su espalda, abrazándolo con cuidado –reprochándome por sentir… algo por ti- apenas susurró entre las lagrimas y el hipo provocado por el llanto.

-No llores por favor- pidió el mayor abrazándole fuerte, sabiéndose culpable de las dudas de aquel ser perfecto e inocente que ahora llora entre sus brazos.

Junsu sabe que es infantil ponerse en ese plan, pero no puede evitarlo. Todas esas emociones que trae arremolinadas en el pecho desde hace bastante tiempo han salido a flote de golpe. Está feliz y confundido, su subconsciente le repite que lo que está pasando es un sueño y que deje de ilusionarse. Pero ya no puede más. Tiene allí el latido desbocado del corazón de su mejor amigo retumbando cerca a su oído, lo tiene tan cerca que podría morir feliz entre esos brazos que le dan seguridad.

Y se siente frágil y vulnerable de nuevo, ya no por pensar que su amor no es correspondido, sino porque ahora no quiere despertar de ese momento irreal que le ha llenado de contentura.

-Lo siento- se disculpa sinceramente y se separa del pelirrojo para jalarle de la mano fuera del agua.

Antes de que les dé tiempo para avergonzarse de su desnudez, ambos ya están cubiertos con esas batas afelpadas que el mayor trajera tiempo atrás.

-Creo que necesitamos hablar- dice secando con sus pulgares las lagrimas que quedaron en las mejillas del pelirrojo; quien frunció el ceño y tomó de la muñeca al pelinegro para llevarlo hasta la habitación, sin importarle en absoluto dejar el piso mojado por sus pasos, obligándolo a sentarse frente a aquella mesita que hay a un lado.

-¿Junsu?- lo llamó una vez que estuvieron acomodados en el suelo, frente a frente, separados solamente por aquel mueble.

-¿Crees que esto es correcto?- preguntó el pelirrojo, hundiéndose en sus propias dudas.

-No me importa si está bien o no… es algo que no puedo evitar sentir- respondió con una sonrisa, algo enternecido por las preguntas y la preocupación del menor.

El corazón del pelirrojo vuelve a agitarse presuroso en su pecho, mientras su cerebro va atando los cabos sueltos de la situación. Se mueve de su sitio y termina sentado al lado del pelinegro.

-… ¿Es por eso que siempre me abrazabas?- pregunta con las mejillas coloradas, perdiéndose en la profundidad de los ojos negros de su mejor amigo.

-Era el mejor pretexto para acercarme mucho más- responde alcanzando una de las manos del menor, sonriendo cuando es él quien entrelaza sus dedos.

-¿Y también por eso, buscabas como acercarte a mi rostro? Susurrándome al oído… o como hace rato cuando estábamos en la cama…- bajó la vista tratando de ocultar su vergüenza.

-Y puedo jurar que cada vez que lo he hecho, he tenido que aguantarme las ganas de robarte un beso- dice y pasea su mano libre sobre el contorno del rostro de Junsu, encontrando sus miradas una vez más.

-…Ayer… te vi… en el baño…- balbucea en voz baja demasiado avergonzado por sus palabras.

-Entonces… sabes lo que provocas en mi- dice sin más y se atreve a atraerlo de la cintura, acomodándolo prácticamente sobre su regazo.

-… ¿Recuerdas lo que pasó hoy en la mañana?-

-¿Tu sueño?- cuestiona recordando claramente los sucesos en su memoria. El menor asiente con la cabeza y apenas en un susurro responde.

-Estaba soñando contigo- confiesa y alza sus brazos tras el cuello del pelinegro, quien le mira sorprendido.

Y no saben en qué momento han vuelto a unir sus labios en un beso necesitado. Se toman el tiempo esta vez para saborear la boca del otro, para descubrirla despacio como si fuera un tesoro recién encontrado; liberan suspiros cada tanto y sienten como las mariposas les revolotean en el estomago.

No pueden creer que están envueltos en aquella situación; están besándose tal y como lo hicieran mil veces en sueños… solo que esta vez es real, y ambos pueden notar los sentimientos que fluyen a través del movimiento acompasado de sus bocas.

Los suspiros del pelirrojo mueren sobre los labios del mayor y la respiración se le altera otro poco cuando siente la lengua de su mejor amigo pasearse sobre su labio inferior, pidiendo permiso para entrar. Acepta y deja que aquel intruso explore a su gusto dentro de su boca.

El pelinegro enrosca sus brazos en la cintura de Junsu, pegándolo a su cuerpo; recibiendo esas manos que se aferran al cuello de la bata que trae puesta y lo jalan un poco más para profundizar aquel contacto. El oxigeno que tienen acumulado en los pulmones se va consumiendo con rapidez y les obliga cada tanto a separarse para dar una bocanada de aire.

Pero esta vez, al separarse, la boca de Yoochun encuentra otro lugar para depositar besos; va bajando por el cuello del avergonzado pelirrojo y con sus manos le abre un poco la bata, dejando entrever su pecho. Deja besos, lamidas y mordidas sobre cuanta piel tiene al alcance, descendiendo hasta la clavícula.

-Ah~ Yoo…Yoochun!- jadea cuando las manos del pelinegro comienzan a jugar sobre su piel expuesta, abriéndose paso entre la bata para llegar a los costados de su cintura. A medida que el calor aumenta sus cuerpos se acomodan por si solos, como si encajaran perfectamente en el otro.

Los ojos del menor se pierden en la mata de cabellos azabache que tiene al frente y se le colorean aún más las mejillas tras escucharse a si mismo gimiendo el nombre de su mejor amigo.

La bata del pelirrojo se va deslizando cuesta abajo por sus hombros, dejándole el torso completamente desnudo y a entera disposición del mayor. Yoochun se dedica entonces a acariciarle despacio con sus manos, marcando con besos y roces esa piel blanca y suave que le vuelve loco.

-Eres… perfecto- susurra el pelinegro contra uno de los hombros del menor, notando al instante como se le eriza la piel.

Sus labios se encuentran una vez más, y extrañamente con cada nuevo contacto sus bocas se vuelven más deliciosas y provocativas; profundizan el beso y pierden de foco todo lo que hay a su alrededor. Solo pueden sentir sus lenguas rugosas probándose, enredándose y saboreándose sin parar.

De un momento a otro Junsu está recostado sobre el frío suelo de madera, con Yoochun sobre él dejándole lamidas en el pecho. Un gemido agudo escapa de la garganta del pelirrojo y es entonces que su cerebro reacciona ante el letargo producido por el placer.

Sus manos apartan el rostro del mayor de su pecho y lo obliga a alzarse un poco para mirarlo.

-¿Eres consciente de lo que estamos haciendo?- pregunta con un nudo en el corazón.

Y siente como se le arrejuntan las lágrimas en los ojos sin llegar a caer; está asustado, emocionado, enamorado y de todo un poco. Quiere entregarle su virginidad a aquella persona que le mira fijamente… pero…

¿Y si resulta ser solo un arranque de lujuria y deseo?

Continuará…

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15 comentarios:

  1. waaaa gracias andaba como loca esperando Yoosu bello!!!!

    waaa me encantan!!!!que bueno que se confesaron de una vez!!!

    esperare actu°!!!

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  2. Kyaaaaaaaaaaaaaa
    No porque lo dejas asiiiii *^*
    Junsu tu raton te ama como piensas que es otra cosa *^*
    Mil gracias esperare la conti ansiosa *^*

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  3. Me encantoooooooooooooo!
    cada vez se pone mas bueno!
    espero la continuación!
    :D

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  4. Junsu ah!! cómo puedes pensar que el amor de tu Yoochun puede ser un arranque de lujuria?? ;____; es amor baby, no lo dudes; ratón demuéstrale a tu delfín con cuidado todo lo que quieres.

    El capi estuvo lindísimo *-* la forma tan natural con que fluyen las cosas entre ellos es simplemente maravillosa, incluso las dudas resguardadas en la verguenza y la culpa de los silencios guardados porque el sentimiento sabe a "prohibido"

    *suspira* confío en que Yoochun haga correctamente las cosas con Junsu.

    Gracias, Ya Ne! ;D

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  5. ah! por fin se confesaron <3 Junsu no te espantes, Yoochun te ama,esta parejita es como siempre hermosa, gracias por actualizar :)

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  6. omgsunnn!!! amo cuando SuSu se siiente confundiidooo xDDD
    pero el raton hara todo lop posiible por mostrarle q el amor q siiente es real ii q lo adoraaa!!!
    awww me enqantooo axiii~ esperare la contiinuaciiónnnnn!!!
    *----------*

    LOVE YA~

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  7. Nooooooooooooooooooooo!!!!!!!!!, cómo puede romper el momento? DDDDDDDDDD8, tiene dudas ok, pero no puede D8...

    Continúalo pronto Axy >.<

    Gracias por compartir~

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  8. Ahhhhhhhhhhhhhh O_O,Me muero Axy porque lo dejas ahí T_T

    Luego Junsu porque le surgen esas dudas en esos momentos, todo iba tan lindo y romántico, claro que Yoochun te ama Junsu no lo dudes nunca T_T

    Ejem, perdón tuve un ataque de nervios xD

    Waaaaaaaaaa T_T ya quiero ver que mas pasa T_T, porfis, porfis, sube la continuación, se que que acabas de subir este capitulo pero por favor T_T.

    jejejejejej n_n espera con ansias el siguiente capitulo n_n

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  9. Noooooooooooooooooooooooooo!, por que lo has dejado ahí? D:.

    Junsuu! por que dudas de Yoochun?, el te ama no dudes de el, >.< ahora Yoochun tiene que demostrarle que le ama para que Junsu ya no dude más.

    Waaaa! quiero saber que más pasa >.< no puedo esperar para ello.
    El capitulo me ha encantado y espero con ansias el siguiente capitulo :3

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  10. por fin actu!!!....waaa hasta q porfin estan juntitos!!!..

    ojala q las dudas no los separe..^^

    grax por la actu..espero con ansias prox cap...

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  11. KIIIAA!! no puede ser!!;w; por fin! y tan bello!!!!<3(debí haberme pasado antes por aka *0*) gracias por la aktu ojala Junsu pliss no pienses eso!! si tu raton te ama! ;-;!
    conti plis!!!<3

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  12. ohh! por fin pude leer(:

    waah! porque duda de Yoochun!?D:
    porque no se deja llevaar!
    jiji ya estan mas unidos :33
    graciaas! ^^

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  13. ohhh mi querido delfin... entregate con confianza... el raton te ama con todo corazón

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  14. Me encanto esa confesión fue hermoso q se dieran cuenta q en cada gesto de supuestamente amistad estaba escondido el amor de los dos~ <3
    Y Junsu no tengas miedo q Yoochun realmente t Ama^^

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  15. aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa.. p oruqe lo dejasta alli!!! T^T tan lindo que esta el ambiente!!!!! y yo matandome lentamente por escuchar precisamente esa cancion T^T
    en fina... gracias por el capo... me voy al siguiente ^^

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